El derecho de admisión es un concepto legal que permite a los propietarios de negocios controlar quién entra en su establecimiento. Este derecho lo ejercen habitualmente bares, clubes nocturnos y otros locales que sirven alcohol. Es importante señalar que el derecho de admisión no es absoluto y debe ejercerse de forma no discriminatoria.
En esencia, el derecho de admisión es un derecho de propiedad. Los empresarios tienen derecho a decidir quién entra en su propiedad y en qué condiciones. Esto incluye el derecho a denegar la entrada a personas que se consideren una amenaza para la seguridad de otros clientes o que no cumplan los requisitos del código de vestimenta.
Sin embargo, es importante recordar que el derecho de admisión no puede utilizarse para discriminar a personas por motivos de raza, sexo, orientación sexual o cualquier otra característica protegida. Hacerlo sería una violación de las leyes antidiscriminatorias y podría acarrear consecuencias legales para el empresario.
Cuando es aplicado el derecho de admisión en España
En España, este derecho está regulado por ley y puede aplicarse en diversas situaciones, como en bares, discotecas, teatros y eventos deportivos.
- Puede ejercerse cuando una persona supone un riesgo para la seguridad de los demás.
- Puede aplicarse en personas que no tengan la edad mínima permitida por un local para entrar.
- Cuando una persona o un grupo de personas muestran un comportamiento que pueda ser un inconveniente o pueda entorpecer el normal desarrollo de las actividades del local.
- Cuando una persona muestre conductas agresivas o presente actitudes violentas.
- Cuando la persona está bajo los efectos de las drogas o el alcohol o cuando no cumple los requisitos de vestimenta del establecimiento.
- También puede aplicarse cuando una persona ha causado previamente disturbios o ha tenido un comportamiento violento.
- Cuando se encuentre completo el aforo del establecimiento.
- Cuando se descubra que una persona porta armas de fuego o cualquier otro tipo de arma que pudiera causar daño a los demás asistentes.
Implicaciones del uso abusivo del derecho de admisión
Cuando una o varias personas abusan del derecho de admisión, pueden sufrir consecuencias legales. El abuso del derecho de admisión puede producirse de diferentes maneras. Por ejemplo, si el propietario o gerente de un lugar público niega la entrada a alguien por motivos de raza, sexo o religión, está infringiendo la legislación antidiscriminación.
Del mismo modo, si niegan la entrada a alguien sin una razón válida, pueden ser considerados responsables de daños y perjuicios. Además de la responsabilidad civil, el abuso del derecho de admisión también puede dar lugar a cargos penales.
Por ejemplo, si el propietario o gerente de un lugar público utiliza la fuerza o la violencia para negar la entrada a alguien, puede ser acusado de agresión o lesiones. Además de la responsabilidad civil, el abuso del derecho de admisión también puede dar lugar a cargos penales.
En resumen, el derecho de admisión es una herramienta legal que permite a los establecimientos públicos garantizar la seguridad y comodidad de sus clientes. Sin embargo, debe aplicarse de manera justa y no discriminatoria, de conformidad con la ley.
